miércoles, junio 02, 2010

Formar un equipo de trabajo eficiente es relativamente fácil cuando cada integrante hace lo que tiene que hacer ,en el mínimo tiempo y con los recursos diponibles. Pero formar un equipo de calidad humana es más complejo. Deben coincidir carácteres, personalidades, formas de ver la vida, historias y experiencias valoricas más o menos similares. Junto a Valeria, Adriana, Paulina, Carlos y Roberto logramos dar forma a un grupo de personas que se tomó el trabajo muy en serio, pero que también supo disfrutar de la amistad, la confianza y la complicidad que nace al plantear una relación más allá de lo laboral.

Hoy, este equipo se "desarma" para asumir nuevos proyectos en otras unidades de trabajo, sin embargo, los lazos que hemos construido permanecerán por mucho tiempo, porque lo que se construye sobre bases sólidas cuesta mucho que se derrumbe. Suerte a todos